Una vez obtenido el DA, se transfiere la información de las tarjetas a soporte papel, rodeando con una línea cada agrupación para facilitar la visión de conjunto. A continuación, aunque sea objeto de otras herramientas, se pueden representar relaciones entre distintos grupos de ideas mediante flechas, y siempre que exista consenso para ello. Por último, se puede establecer una valoración de los distintos elementos del problema, solicitando de los participantes una puntuación en función de si el elemento es poco importante, es importante pero no crítico o es de una importancia crítica. Estas puntuaciones solo se asignan a las agrupaciones de primer nivel, no a los subgrupos, y a las ideas solitarias.
Ventajas y limitaciones
Entre las ventajas más destacables de la utilización del DA encontramos que:
Es una forma eficaz para analizar grandes cantidades de ideas
Promueve la creatividad de todos los integrantes del equipo de trabajo en todas las fases del proceso
Derriba barreras de comunicación y promueve conexiones no tradicionales entre ideas ayudando a los equipos de trabajo a alcanzar consenso
Existen distintas formas de ordenar las tarjetas. La más utilizada es la ordenación convergente en el centro. Esta ordenación es adecuada cuando se tienes 15 tarjetas o menos. Se coloca el tema principal y el resto de las tarjetas alrededor de forma aleatoria. Si el número de tarjetas es superior a 15 quizá resulte menos complicado realizar una ordenación unidireccional, colocando el tema principal en un extremo y dirigiendo el resto de las tarjetas hacia él.